He vuelto a caer
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Si realmente quieres cambiar tu vida mientras necesitas dominar la práctica de "recomenzar", ésta es común entre quienes pierden la concentración y su mente se descontrola. Por lo que el consejo es no luchar contra ello, no darle vueltas, no culparse; simplemente, volver a concentrarse en el objetivo. En cuanto uno se dé cuenta de que ha perdido el camino que inicio, vuelve a empezar con toda tranquilidad y lo hace las veces que sea necesario.
Esta práctica implica un cambio radical de actitud, porque, en vez de reaccionar con autocríticas o sentimientos de culpa cuando nos vemos apartados del camino que estamos pretendiendo seguir, simplemente hay que volver a la conducta que se había decidido seguir, aquí y ahora, con plena entereza y seguridad.
Pongamos que sientes ansiedad en el trabajo o que eres propenso a discutir, y tu finalidad es dejar de ser así. Pero, con frecuencia, después de una decisión de cambio, o algo se quiebra y el comportamiento indeseado vuelve a aparecer con fuerza. Una vez más, en el trabajo te estresas o sigues peleándote con los demás. De nuevo, vuelve el juicio crítico, el desánimo y la frustración. Lo intentas una y otra vez pero no lo consigues y llegas a creer que no puedes cambiar.
Volver al principio "recomenzar" significa abandonar tus reacciones normales de crítica, juicio y quejas. No niegas tus pensamientos ni sentimientos, no intentas hacerlos desaparecer, sino que los reconoces sin realizar ningún juicio sobre ellos pero sintiendo compasión por el momento difícil qu estás viviendo. Entonces, no olvidas tu propósito de cambiar, pero lo llevas al momento presente, las veces que sea necesario. Desarrollas la fuerza de volver a empezar porque has adquirido el compromiso de perseguir tu objetivo con la fuerza de voluntad y la inspiración necesarias para volver a siempre donde quieres ir.
La práctica de recomenzar es un modo más efectivo de alcanzar tu propósito que centrarte obsesivamente en él. Da igual que intentes adelgazar, dominar tu genio o dejar de ser un adicto al trabajo; sabes que lo tienes que hacer para cortarlo de raíz, pero no lo haces. Así que cuando descubras que estás comiendo más de la cuenta, simplemente deja de comer en ese momento sin hacer ningún drama: simplemente retomas tu senda y vuelves a empezar.
Cuando somos capaces de considerar nuestra vida de esa forma, en vez de insistir en que debería ser de otra, empezaremos a valorar las cosas tal y como son en realidad.
Y tú, ¿Cuántas veces has intentado para lograr tus objetivos? ¿valió la pena? Compartamos nuestras experiencias y así nos daremos cuenta de que no somos los únicos que caemos y nos levantamos y una y otra vez.
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